Las entidades de crédito han ampliado su oferta de “préstamos coche”, llamándolos con distintos nombres comerciales y añadiendo novedades, pero en el fondo son variaciones de préstamos personales. Recuerde que debe considerar:
Tipo de interés – Comisión de apertura y otros gastos – Comisión de amortización anticipada – Importe máximo a financiar – Plazo – Cuota mensual
Para comparar préstamos entre entidades, utilice siempre la TAE, que incluye el tipo de interés nominal y la comisión de apertura y otros gastos, que pueden variar mucho. Haga la comparativa para un mismo importe y mismo plazo de tiempo porque estas variables influyen en el coste total. Los bancos suelen ofrecer una reducción en el tipo de interés si, por ejemplo, ya cuentan con su nómina domiciliada o le han concedido la hipoteca. El préstamo personal puede ser de tipo fijo o variable.
Si es posible, negocie con el banco para que no le cobre comisión de amortización anticipada. Así, si en el futuro dispone de un dinero extra, podrá reducir el plazo y/o la cuota mensual, e incluso cancelarlo sin abonar una penalización. No permita que el banco quite esta comisión a cambio de subir la cuota mensual.
Como en la mayoría de los préstamos personales, hará falta pagar además el coste del fedatario público para formalizar el contrato.
El importe a financiar (precio total del coche menos la entrada), el plazo y el tipo de interés determinarán la cuota mensual a pagar. Pida siempre ver el cuadro de amortización en el que se detalla el capital, intereses y cuota a pagar mes a mes durante la vida del préstamo. Asegúrese de que su presupuesto le permite asumir esta cuota más los otros gastos inherentes del vehículo.
En cuanto al plazo, cuanto mayor sea, menores resultarán las cuotas mensuales. Lo tradicional era financiar automóviles a un plazo máximo de cinco años, pero ahora se ofrece más flexibilidad y es posible encontrar préstamos con plazos de hasta 10 años para coches nuevos. Pero ojo, no conviene alargar el plazo más de lo necesario sólo para bajar la cuota porque el precio total será mucho mayor.
Busque un equilibrio entre cuota mensual y plazo. No se aconseja financiar un bien durante más tiempo del que se va a utilizar. Si cree que dentro de cinco años el coche ya no cumplirá sus necesidades, no elija un plazo mayor de financiación. Recuerde también que no puede vender el vehículo si no está pagado.
Tratándose de algo que pierde mucho valor con el paso del tiempo, si necesita reducir la cuota mensual es preferible optar por un coche menos caro, o pagar más entrada, que alargar el plazo. Cabe mencionar que el plazo mínimo para devolver un préstamo coche normalmente es de 12 meses, pero se suele cobrar un interés mucho más elevado para este plazo tan corto.
Estudiarán su caso para determinar si les interesa arriesgarse. El banco valorará su capacidad de pago antes de conceder un préstamo. Si existen dudas, podría hacer falta un avalista.
Para los bancos, lo más importante es saber si usted tiene “capacidad de pago”. Para poder determinarlo analizan sus ingresos, sus deudas (comprobando las deudas que tiene en cualquier entidad de crédito) y estiman sus gastos mensuales a partir de su edad, situación familiar, etc. (algo así como el presupuesto personal). También revisan su “historial crediticio”, para comprobar si figura en algún listado de impagos.
Si existe alguna duda sobre la probabilidad de cobrar el préstamo, el banco puede exigir la garantía adicional de un avalista, es decir, otra persona que firme estar dispuesta a hacer cargo del pago si usted no lo hace.
http://youtu.be/p2_CR-3Q0p4